lunes, 27 de enero de 2014

Capítulo 5

*Alex*
Solo Angy respondió...
Angy: Tenemos que hablar.
Me puse nerviosa, hablar implicaría vernos, vernos de nuevo. Tenía muchísimas ganas de volver ha verlas, pero desde ese último mensaje habían pasado 2 horas y Amy no daba señales de vida.
Me puse a recoger la casa y no pude evitar entrar en las habitaciones de las chicas, eso no me sentaba bien.
Bajé al salón y miré mi móvil, tenía un WhatsApp, del grupo de las chicas...
Amy: ¿Sabríais llegar a esta dirección?
Alex: Sí, era nuestra cafetería
Angy: ¿Cuándo nos vemos?
Amy: ¿Puede ser mañana por la noche? 
Alex: Por mí, sí
Angy: Claro
Amy: Entonces allí nos vemos mañana 
Angy: Vale
Alex: Adiós 
Me puse nerviosa y contenta a la vez, los volvería ha ver. Me duché, cené, preparé la ropa para ir al día siguiente a trabajar y me dormí. 
Después de todas las cosas que habían pasado hoy estaba cansada.
Por la mañana, me levanté, me duché, me vestí, desayuné y me fui a trabajar. 
Entraba a las nueve y eran las nueve menos veinte, así que me llegue al Starbucks a por un par de capuchinos, uno para mi jefa, Carol, y otro para mí.
Llegué, saludé a la recepcionista y subí a la oficina de mi jefa, en la quinta planta. 
Le entregué el café, me fui a mi mesa, que estaba en un despacho contiguo al suyo, puesto que soy su ayudante, y me puse ha terminar unos diseños.
A las diez y media mi jefa me llamó para que fuera a su despacho...
Alex: ¿Se puede?-dije tocando en la puerta.
Carol: Claro, pasa y siéntate.-dijo señalándome la silla que estaba delante de su escritorio con la maño.
Alex: Y solo me falta terminar un poco más de la mitad de los diseños que me has dado esta mañana.
Carol: Perfecto pero de lo que te quería hablar es de que, cada año, se celebra un desfile de diseñadores sin conocer y todos los años me preguntan por si en mi empresa hay alguno, pero hace mucho tiempo ya que no participamos debido a que nadie tiene el talento suficiente para participar, pero este año va a ser distinto, porque quiero que tu nos representes este año.
Alex: Yo...-me quede de piedra- No se que decir.
Carol: Pues estaría bien decir que el lunes me traerás todos tus diseños y elegimos los diez mejores para el desfile.-dijo mostrándome un gran sonrisa.
Alex: Vale.-dije levantándome de la silla con otra sonrisa.
Carol: Pues ya te dejo que termines los diseños.- Y con las mismas salí de su despacho y me dirigí al mio.
Cuando llegué estaba sonando mi movil...
Alex: ¿Diga?
Zayn: Hola.
Alex: Hola Zayn, ¿qué tal?
Zayn: Bien, ¿Y tú?
Alex: Bien también.
Zayn: Quería preguntarte si querrías comer conmigo.
Alex: Claro, ¿pasas a por mí?
Zayn: Si, ¿al piso?
Alex: No, a mi trabajo.-le di la dirección de la oficina.
Zayn: ¿A qué hora?
Alex: A las una.
Zayn: Vale, pues después nos vemos guapa.
Alex: Adiós.
Me había dicho guapa...
A las una menos cinco tenía más de la mitad de los diseños terminados y me preparé parair a comer con Zayn. 
A las en punto me llegó un whatsapp de él diciéndome que me esperaba en la entrada, así que salí de la oficina y bajé a la entrada, encontrándome a Zayn, con unos banqueros y una camiseta amarillo pastel... 
Alex: Buenas tardes.-dije acercándome a el para darle dos besos.
Zayn: Buenas tardes-dijo repitiendo mi gesto.
Alex: Y bueno, ¿dónde vamos a ir?
Zayn: A un sitio que te encantará.-dijo sonriendo.
Nos montamos en su coche y me llevó a un pequeño restaurante con una terraza interior rodeada de árboles que era maravillosa. Nos pasamos toda la comida poniéndonos al día de lo que había pasado durante todo este tiempo y no me insistió en que le contara lo que había pasado con las chicas, cosa que le agradecí profundamente.
Le conté que esta noche habíamos quedado para hablar y que tenía muchas ganas de que arregláramos las cosas y el me contó que pronto tendrían algunos conciertos y tendrían que ensayar.
Estuvieron hasta las dos y cuarto hablando ya que tenía que volver al trabajo y él tenía que ensayar...
Zayn: Bueno pues ya hablamos y quedamos ¿vale? 
Alex: Claro, pero quedamos un día para dar un paseo.-dije dándole dos besos como despedida.
Zayn: Adiós preciosa-dijo dándome un beso muy cerca de los labios.
Alex: Hasta pronto.- le contesté sin tartamudear mucho y poniéndome muy roja.
Llegué a la oficina justo a mi hora y terminé lo que tenía que hacer antes de que terminará mi horario, así que fui ha hablar con mi jefa por sí necesitaba algo más o podía irme a casa y como no tenía nada más que hacer, pues me fui a casa.
Llegue a las siete y me metí directamente en la ducha. Cuando salí eran las siete y media, me había retrasado arreglándome el pelo. Me vestí lo más rápido que puede, http://www.polyvore.com/ld_alex_1cclc/set?id=101149640 , y cogí el coche para dirigirme a la cafetería en la que había quedado con las chicas.
Cuando llegué las chicas ya estaban y el saludo fue muy incómodo. Pedimos las bebidas y Amy empezó ha hablar...
Amy: Los chicos están detrás de nuestra pista.
Alex: Han estado en el piso, hablando conmigo.
Angy: A mí también me han encontrado-suspiró.
Alex: ¿Qué vais a hacer con Louis y Liam?
Amy: He hablado con Liam y no quiere dejarme.
Angy: Louis opina lo mismo, quiere que vuelva a ser la de antes.
Alex: ¿Los dejaréis estar a vuestro lado.
Angy y Amy: No.
Alex: ¿Por qué?
Angy: No soy la misma loca e infantil de antes, ahora tengo muchas responsabilidades y no tengo tiempo para otra cosa que no sean las empresas.
Alex: Solo tienes dieciocho años, no deberías estar pendiente de esas cosas ya.
Angy: Pero no puedo hacer otra cosa.
Alex: ¿Y tú, Amy?
Amy: No sé quién soy en este momento y mucho menos lo que quiero, así que prefiero tener a todas las personas a las que quiero lejos para así no haceros daño.
Alex: Eso es peor.
Amy: No lo sé, pero prefiero estar...
Alex: ¿Sola? ¿Crees que sola conseguirás solucionarlo todo? Pensaba que éramos amigas, hermanas. Porque eso era lo que erais vosotras para mí, mis hermanas. No sé ni como nos dejamos influenciar de esa manera hasta el punto de perder nuestra amistad-negó con la cabeza mirándonos dolidas-.¿Sabéis? No os reconozco y, si no lo hago yo, ¿quién lo hará? Mejor me voy, pero seguiré estando disponible si algún día decidís volver a ser mis loquis, esas chicas a las que quiero como si fueran mis hermanas.
Me levanté y salí decidida de ahí. Llegué al coche y lo único que puede hacer fue derrumbarme y hecharme ha llorar. Me tranquilicé, me limpié las lágrimas y fui al piso. Nada más llegar me apoyé contra la puerta deslizandome hacia el suelo y me hecho a llorar otra vez sin poder evitarlo.